El equipo marplatense derrotó 75-68 a Obras por el Súper 20. El aplomo de sus jugadores más experimentados y los aciertos de Sansimoni en el cierre del partido fueron claves para el equipo marplatense. El jueves enfrentará a Hispano Americano, desde las 19 y en el estadio de Boca.
Peñarol dio otro paso adelante como equipo y le arrebató con un cierre inteligente, por 75-68, un partido muy parejo a Obras Básket por la cuarta fecha del Torneo Súper 20 de básquetbol.
Bruno Sansimoni, decisivo con sus tiros y su control de juego, impuso su mayor aplomo en los momentos calientes y fue una vez más factor de desequilibrio.
El equipo marplatense, que sufrió durante gran parte del cotejo al juego interno local, sobre todo al joven Lautaro Berra y en menor medida al uruguayo Emiliano Serres, logró revertir un inicio adverso con mucha intensidad defensiva, corridas oportunas y parejos aportes individuales.
El pivote Phillip Lockett, con 11 puntos y 10 rebotes, fue de lo más positivo del equipo y, asistido por Sansimoni, consiguió a falta de un minuto una conversión que selló el curso de la historia.
Obras, con Berra y Serres a pleno, comenzó 7-0 y tuvo dominado en la primera parte del partido a un Peñarol confundido. Las respuestas para Leandro Ramella comenzaron a aparecer a partir del ingreso de Tomás Monacchi, quien mejoró la defensa con su energía y aportó puntos en transiciones a una flaca ofensiva.
Así el equipo marplatense logró equiparar en 13 al final de un pobre primer cuarto y comenzó a edificar una interesante ventaja en el segundo. Federico Marín y Carlos Buemo se unieron a Monacchi y Peñarol logró escapar 31-21 a falta de tres minutos para el descanso largo.
Pero los de Ramella cerraron mal, Obras encontró los únicos resquicios del cuarto para atacar a una defensa sólida y al entretiempo llegaron casi nivelados.
El segundo tiempo fue golpe por golpe y los dos equipos se alternaron en el dominio del marcador y por muy poca diferencia. Peñarol mantuvo el tono defensivo en los peores momentos y Sansimoni apareció en escena con su confiabiliad de los primeros partidos para anotar desde lejos.
Esos argumentos le permitieron mantener la paridad. En el cuarto final, con muchos minutos de Al Thornton en el banco por acumulación de personales, Peñarol fue encontrando un mejor rendimiento con la doble base Sansimoni-Valinotti. Y cuando Ramella mandó el regreso a la cancha de Marín para afrontar el cierre, el equipo terminó de serenarse.
Obras, en el cierre, ejecutó con precipitación y Peñarol lo hizo con más inteligencia de la mano de Sansimoni. Así, por un lado, encontró una luz y, por otro, le tiró a su rival toda la presión encima. Los de Murphy no la resistieron y fue festejo “milrayitas”.
La síntesis
Obras Básket 68
J. P. Venegas 4, L. Valussi 5, J. Rodríguez 17, E. Serres 12 y L. Berra 18 (FI); F. Inyaco 0, V. Andrade 4. F. Smaniotti 3 y F. Fuenmayor 5. DT: Bernardo Murphy.
Peñarol 75
B. Sansimoni 15, C. Buemo 9, F. Marín 13, A. Thornton 6 (x) y P. Lockett 11 (FI); T. Monacchi 9, J. Valinotti 10, N. Franco 2, I. Bednarek 0, L. Gorosterrazu 0 y J. Cabrera 0. DT: Leandro Ramella.
Estadio: “El Templo del Rock” de Obras.
Árbitros: Fernando Sampietro-Enrique Cáceres-Alejandro Trías.
Parciales: 13-13, 29-31 y 53-52.